La enfermedad ocasionada por la pandemia del COVID-19 viene afectando de manera desproporcionada a la población
afrodescendiente en Abya yala -América Latina-, esto es un resultado de las múltiples desigualdades raciales acumuladas del colonialismo y de la institución de la esclavitud; desigualdades que se han enmarcado actualmente en la discriminación estructural, consolidando un ordenamiento racial y sistémico de nuestras sociedades.

A principios del año 2020, en el continente, los reportes del COVID-19 ordenados por etnia, tan solo fueron publicados por los países: Estados Unidos, Brasil y Colombia. En el caso de Colombia, según el Instituto Nacional de Salud en el mes de junio del mismo año, de un total de 77.113 contagios, las autoridades sanitarias confirmaron que 3,793 se localizaron en la población afrodescendiente, lo que representa un 4,92% de los casos totales del país.







El presente año, Colombia atraviesa el tercer pico de la pandemia y varias ciudades se encuentran en cuidados especiales, cuarentenas y toques de queda estrictos. En el último reporte del mes de abril se confirmaron 17.212 nuevos casos. Según el “cuestionado” censo aplicado en el año 2018 -que registró una disminución en el número del porcentaje de la población negra, afrodescendiente, raizal y palenquera (NARP)- el Valle del Cauca se registra como el territorio con mayor número de personas NARP; tras este departamento se ubican el Chocó y Antioquia.

“En el territorio rural es en donde vemos los abates de la falta de políticas públicas en relación a la salud, donde antes de llegar al médico tienen que encontrarse con un curandero”. Sabedor Jackson Ramírez Machado

Hoy Antioquia y el Valle del Cauca son dos de los departamentos que más números de contagios presentan. Tras el anuncio en el mes de febrero de 2021, sobre la adquisición de un número —no muy significativo— de vacunas para el tratamiento del COVID-19 para la fase 1 y 2 de vacunación, es posible observar en las gráficas liberadas por las campañas de vacunación del Ministerio de Salud que los departamentos del Valle del Cauca y del Chocó registran un número menor de vacunas asignadas en relación a otros departamentos. El Chocó es registrado por este plan de vacunación como uno de los territorios con menor impacto del virus, haciendo casi ausente la presencia de equipos médicos para el tratamiento de los síntomas y las urgencias dentro del departamento.

“(…) es necesario mezclar los objetivos de desarrollo sostenible del Chocó y el Pacífico con los del país, porque tenemos que hablar de la reducción de la pobreza, de la discriminación, para poder hablar del crecimiento económico a través de los saberes ancestrales, tenemos que ubicarnos en el contexto y ese contexto nos tiene que llevar a interpretar las realidades de nuestros mayores, de la gente del campo”. Sabedor Jackson Ramírez Machado

¿Cuáles son las estrategias de sobrevivencia al virus COVID-19 empleadas por las comunidades afrodescendientes como alternativa al abandono del gobierno nacional en el plan de vacunación y atención de la salud? ¿Son las huellas de africanía y de la memoria ancestral de la salud natural, las que han posibilitado a las poblaciones afrodescendientes del país mantenerse vivas en la ciudad y en el campo?

Es en medio de este contexto desolador e históricamente opresivo que se hace oportuno y preciso despertar la conciencia del Ubuntu. Esta es una filosofía de vida nacida en Sudáfrica que propone el desarrollo de la práctica de los buenos vivires, estableciendo una cosmovisión y organización de vida espiritual, social, económica, política y cultural de armonía, afirmada en la correspondencia de bienestar entre el territorio, las personas y la naturaleza.

“Para nosotros el bosque limpia todo, es nuestro laboratorio, yo creo en el árbol, yo creo en mi abuelo, yo creo en mí” Shipib-Konibo: diálogo con las plantas. Florence Guapil Rescatado de

El término Ubuntu deriva del zulú-xhosa (sur de África): ‘umuntu, ngumuntu, ngabantu’ que significa “una persona es una persona a través de otras personas” —que se expresa también como: ‘soy porque somos’ o ‘existo porque existes’—. Esto reconoce el valor de cada individuo o grupo, la aceptación y aprecio de nuestras diferencias, a la vez que reconocemos nuestra espiritualidad común, nuestra responsabilidad por el bienestar de otros y un sentido de pertenencia a una familia humana y a estar profundamente conectados con la naturaleza y el universo”. Manual para formadores en filosofía UBUNTU, (s.f.). Helen Sayers.


La filosofía del Ubuntu rescata las prácticas y saberes que buscan avalar un buen vivir, exploran una relación solidaria con el territorio, para cuestionar las cadenas extractivistas y el consumismo. Con esta filosofía se hace un llamado al pensamiento de la colectividad, al acompañamiento y al auto-reconocimiento; al igual que a la memoria como ejercicio de resistencia histórica que propone la escucha de los testimonios y conversaciones de las personas mayores y sabedoras de la medicina natural, para establecer el rescate de esas prácticas obviadas y distantes que hoy en medio de una pandemia hacen un eco estrepitoso.

“Las medicinas tradicionales (…) están seriamente amenazadas por fenómenos como el desplazamiento de las comunidades de sus territorios de origen y por su relación subalterna en la relación con el sistema médico oficial' Trasplantando nuestras vidas. Un viaje hacia los saberes… Rescatado de

La medicina tradicional es concebida y entendida dentro de las comunidades afro como un conjunto de prácticas, fe y saberes asociados a la naturaleza que transitan como terapia física y espiritual, ejecutada a partir de técnicas manuales que proponen establecer un sistema de salud comunitario dirigido por sanadoras(es) con experiencias en el plano físico y operando también en planos mágicos, espirituales y religiosos. Estos conocimientos adquiridos a través de la educación informal han sido los responsables de la atención de partos, picaduras de animales venenosos, accidentes laborales y de patologías físicas, mentales y de carácter espiritual en los territorios étnicos del país, así como en diversos escenarios rurales del continente.

“Siempre ha habido dos tipos de conocimientos: la religión y el mundo científico, que cuando llegaba a las comunidades ya nadie quería acudir a las plantas medicinales. Este es un momento en el que podemos salir a la luz y decir al mundo que los pueblos originarios también tienen su saber”. Shipib-Konibo: diálogo con las plantas. Florence Guapil Rescatado de
“Con la nueva pandemia de COVID-19, volvió a demostrarse el gran poder de resolución de problemas de salud pública que pueden resultar de la conciliación de ambos medicamentos, porque según la historia de los países que más éxito están teniendo en el tratamiento de COVID-19, reportó el uso y combinación de la medicina tradicional y moderna en la curación de personas infectadas”. Medicina tradicional versus moderna ante COVID-19. Bertrand G. Mendes

En este orden de ideas, es necesario atender a las invitaciones que sabedoras(es) de la medicina ancestral afro y de los pueblos originarios han hecho desde hace varias décadas, una invitación a la conciliación de prácticas y conocimientos sobre la medicina para mejorar la atención de la población, propiciar a las comunidades una consulta oportuna y digna y con ello garantizar el derecho a la salud, respetando los diversos conocimientos en el espectro de la medicina moderna y la etnobotánica.

“La etnobotánica es una ciencia interdisciplinaria entre las ciencias naturales y las sociales, su estudio radica principalmente en cómo los seres humanos usan los recursos vegetales que les rodean para satisfacer sus necesidades materiales y espirituales”. Sabedor Jackson Ramírez Machado .
“(…) cuando el COVID, yo hacía unas botellas de una bebida tradicional ancestral que se llama viche, la destilación más ancestral y esa destilación la revuelvo con plantas medicinales y las pongo a fermentar y yo las regalaba, y a todos que tenían COVID les decía: —tómate esto—, y la gente a los días ya estaba sin ningún malestar”. Sabedor Jackson Ramírez Machado .

Aquí nos interesa centrar la atención en los conocimientos de la salud natural, propios de las comunidades afro, para la prevención del contagio del virus, pero reconociendo que estas estrategias de sobrevivencia natural están arraigadas o conectadas a otras experiencias de sanación y contención comunal, como lo es el canto. Los procesos de recolección o la compra de las plantas, la preparación y la aplicación de los bebedizos, son asistidos por cantos y coros que hacen de esta experiencia un ritual. Las cantaoras(es) y las yerbateras(os) agradecen y piden a favor de las plantas, le cantan al nacimiento de los bebés (arrullos), a la pubertad (rumba), y a la muerte (alabaos), entre otros.

“La práctica rítmica del cantá y de danzar se convierte, por un lado, en una práctica pedagógica que reconfigura el saber ancestral y reivindica el papel protagónico de la mujer, por otro lado, en memoria viva, que ancla motivacionalmente el sentir del pueblo en la constitución de una unidad relacional de sentido, en un entretejerse a dos elementos: la tierra (…) la celebración ritual”. El canto como mecanismo de reparación en las comunidades negras, víctimas de la violencia, del Pacífico colombiano: entretejiéndose con el grupo Integración Pacífico, 2016. Carmen Helena Díaz Caicedo, John Alexis Rengifo Carpintero.

“(...) las abuelas(os) nos invitan al policultivo, donde se siembra plantas amargas, dulces, medicinales, y las comestibles. Ese policultivo es la sociedad, el mundo. En la sociedad hay dulces, amargos, “rasquiñosas”. Si alguna planta está mal en el policultivo, ese elemento tiene correspondencia con la sociedad, el ambiente se equilibra por medio de la siembra del cultivo” Profesor Join Red.

El canto es visto como un mecanismo de reparación, de resiliencia, de procurarse mediante el cuidado del entorno y la actuación frente a la rutina de los prejuicios y desigualdades socio-históricas. Este finalmente se convierte en el elemento oral portador de una narrativa que fosiliza las historias de grupos sociales, al mismo tiempo que las dinamiza.

“Mientras andaba, Guandú repetía alabaos, cantos y oraciones con las que había crecido y que lo habían acompañado en situaciones alegres, tristes, peligrosas y emotivas, además que le habían transmitido los conocimientos de la relación de sus ancestros con la naturaleza. Caminando repetía: “Matica de albahaca, te quiero sembrar. Sembrarte quisiera, no tengo lugar. Al cielo llévame, de dios a gozar, ahí sentadita en el trono de la eternidad”. Trasplantando nuestras vidas. Un viaje hacia los saberes sobre plantas en Esfuerzos de Paz 1 y Nuevo amanecer, Medellín, Colombia, 2011. Vladimir Montoya Arango Rescatado de

Hablar a plantas from Astrid González Quintero on Vimeo.



Para algunos pueblos andinos y para algunas comunidades afro la enfermedad involucra aspectos orgánicos: entendido como lo que atañe al cuerpo, y aspectos inorgánicos que corresponde a los estados de la mente. “(…) para curar el dolor físico hay que ocuparse también de la mente del enfermo. Los afectos son parte de los procesos de curación, pues la enfermedad ataca a lo corporal y a lo mental”. Un jardín propio Rescatado de


“La medicina es regida por varias nociones espirituales, leyes cosmogónicas, físicas y biológicas y algunas son regidas experimentalmente por los principios de los seres, es decir, los signos y virtudes de las personas que tienen el poder de curar sin tocar”. Sabedor Jackson Ramírez Machado

La existencia de prácticas de índole católicas/africanas en la medicina ancestral en el Pacífico adquieren relevancia para los habitantes, al igual que para la diáspora, pues se trata de ejercicios y técnicas manuales correspondidas por un pensamiento mágico. Tanto el diagnóstico como la terapéutica son desarrollados en contextos claramente mágicos. “(…) se cuenta con la influencia positiva que el ritual curativo puede ejercer sobre la capacidad natural de recuperación del paciente, especialmente en contextos donde la confianza en el remedio es absoluta”. Plantas mágicas de la provincia de Albacete: maléficas, protectoras y mágico-curativas


La existencia de prácticas de índole católica-africana en la medicina ancestral adquieren relevancia para la diáspora, pues se trata de ejercicios y técnicas manuales correspondidas por un pensamiento mágico. Tanto el diagnóstico como la terapéutica son desarrollados en contextos claramente mágicos. “(…) se cuenta con la influencia positiva que el ritual curativo puede ejercer sobre la capacidad natural de recuperación del paciente, especialmente en contextos donde la confianza en el remedio es absoluta”. Plantas mágicas de la provincia de Albacete: maléficas, protectoras y mágicas-curativas, (s.f.). Alonso Verde, Diego Rivera.



La salud y la enfermedad son procesos estrechamente relacionados con la influencia de los sueños, las premoniciones y los saberes espirituales, sobrenaturales y naturales innatos, se trata de seres humanos que pueden enfermar a otros.

“En palenque se piensa que las enfermedades son causadas por espíritus ancestrales que vigilan el comportamiento humano y causan dolencias a las personas que incumplen las normas culturales (…) algunos malestares son atribuidos a la influencia mágica de terceros” Plantas y territorio en los sistemas tradicionales de salud en Colombia. Contribuciones de la biodiversidad al bienestar humano y la autonomía, 2013. Carlos Vásquez Londoño, Sebastián Restrepo Calle.


En este contexto se asume que un gran número de enfermedades son causadas por terceros, por entes sobrenaturales que vigilan el comportamiento y causan dolencias a quienes incumplan con las normativas, con los estándares sociales e históricos pactados en la colectividad. Dentro de esta lógica territorial, las enfermedades ocasionadas por otras personas, pueden manifestarse en el mal de ojo, los pujos, entre otras. Sin embargo, se piensa que los males en el cuerpo y en la mente también son generados por los conflictos, el destierro y el abandono estatal.

“(…) los nuquiseños piensan que la salud y la enfermedad en el ser humano dependen de múltiples factores (…) la llegada de la guerra, es elemento que afecta la integridad física y espiritual del entorno, influyendo directamente sobre la salud y la enfermedad”. Plantas y territorio en los sistemas tradicionales de salud en Colombia. Contribuciones de la biodiversidad al bienestar humano y la autonomía, 2013. Carlos Vásquez Londoño, Sebastián Restrepo Calle.

Y a partir de este momento podemos comenzar a revisar algunos detalles sobre las plantas medicinales que son empleadas en los territorios étnicos en el país con fines terapéuticos y/o fines mágicos.



“Hay unas plantas que son mágico/religiosas y eso tiene que ver con la medicina derivada del componente espiritual y de la religiosidad. Coger las plantas en luna o sembrarlas en otra fase lunar”. Sabedor Jackson Ramírez Machado
“Algunos nuquiseños (…) utilizan oraciones, ensalmos y conjuros denominados secretos, que son un conjunto específico de palabras alusivas a la religión católica, pero con efectos mágicos tangibles; rezos usados con fines terapéuticos (…) en Nuquí se reconocen dos categorías principales de secretos, los divinos o relacionados con el bien y que generalmente son acciones católicas, y por otra parte, los secretos pertenecientes a lo humano es decir, en los que se invocan seres diabólicos y se desea el mal a los demás” Plantas y territorio en los sistemas tradicionales de salud en Colombia. Contribuciones de la biodiversidad y bienestar…






“Para los habitantes de Palenque San Basilio, Kankamaján o Kankamán es un término empleado para designar a los curanderos que median con lo sobrenatural (…) son personas que conocen oraciones o secretos, saben el uso de las plantas medicinales, pueden transformarse en animales, hacerse invisibles, blindarse ante las balas y viajar de un sitio a otro volando” Plantas y territorio en los sistemas tradicionales de salud en Colombia. Contribuciones de la biodiversidad y bienestar…







Recetas, brujería, sanación



La infusión: para realizar una infusión hierva agua, apague el fuego y añada la planta. Inmediatamente tape la olla y deje reposar por 5 o 7 minutos. Finalmente cuela y bébala caliente. Esta forma de preparación es apropiada para flores y hojas porque permite conservar las propiedades medicinales de las plantas y evita consumir las propiedades curativas en el calor.

La cocción: para realizar una cocción coloque la hierba en una olla con la cantidad necesaria de agua y lleve a ebullición. Si va a beber el preparado, las flores, hojas y tallos se hierven de 3 a 5 minutos. Las raíces deben estar previamente molidas, las debe hervir entre 3 y 8 minutos máximo. En caso de utilizar el remedio de manera externa, las flores, hojas y tallos se hierven de 5 a 10 minutos. Las raíces deben estar previamente molidas y las debe hervir entre 10 y 30 minutos máximo.
Moler: Moler una planta consiste en desmenuzar hasta reducir la planta en trozos muy pequeños. Para esto puede usar un mortero o una piedra de río sobre una superficie plana.
Picar: El ejercicio de picar consiste en cortar las hojas, flores y frutos en trozos pequeños. Para esto se puede usar un cuchillo o una picadora.



“A veces nos encontramos con que no solamente es la ingesta de los productos, zumos de las plantas, sino que también son los baños. Especialmente en el departamento del Chocó y en muchas partes de Colombia en la diáspora afrochocoana, en el marco de la pandemia, nosotros tenemos unas plantas que se llaman sauco, orozuz, matarratón, esas tres plantas se cocinan, se toman y también uno se baña y con ellas acabamos con el COVID”. Sabedor Jackson Ramírez Machado




1. Matarratón:



quita la fiebre, la varicela, el dolor de cabeza.



Encontramos que la celidonia sirve para bajar los efectos del virus, que el matarratón, sauco, orozuz, jengibre, albahaca, pronto alivio, suelda con suelda, servían para neutralizar el virus. En mi familia mi papá tuvo el virus, yo lo atendí con plantas y él tiene 84 años”. Sabedor Jackson Ramírez Machado
(…) el orozuz y el matarratón, aunque son silvestres, nosotros le dábamos sus baños serenados; las molíamos y las dejábamos serenar y al otro día las poníamos al sol, y esa acción entre la noche, el sol y la luna genera una carga energética”. Sabedor Jackson Ramírez Machado




2. Albahaca de monte:

Planta aromática que puede llegar a ser tóxica, se utiliza en baños y emplastos para bajar la fiebre. Los baños se hacen machacando la planta luego se saca la semilla y la hoja, se aplica en el cuerpo y no se saca. Es una planta caliente utilizada para sacar fríos y dar energía.



3. Limoncillo:

Planta aromática utilizada en bebidas calientes para sacar los fríos, si se toma frío es refrescante, sirve para sacar las fiebres. El limoncillo en infusión mejora la fiebre (…) se usa para los malestares respiratorios, mejora la migraña.



4. Coca:





Si se mezcla con anamú se hace un jarabe que sirve para la tos, la asfixia y la gripe; si se macera en alcohol con dos o tres alacranes o marihuana, alivia los dolores musculares, artritis, reumatismo y dolores de huesos. La coca para el daño de estómago, dolores reumáticos y de cabeza, siempre se usa seca. Se coge la planta y se deja secar al sol o a la sombra sobre un periódico o en el patio (…) en aromática o té se echa la hoja en agua caliente y se deja reposar, luego se toma.


5. Pronto alivio



para los nervios, para bañar a los bebés y niñas(os) cuando tienen gripa. Se macera, se mezcla con agua y se toma. Se echa en un platón con agua y se deja al sol, para bañar. Sirve para aliviar problemas respiratorios como la gripe, tos y secreciones bronquiales. Infusión 3 veces al día.
-Hervir agua, agregar 6 hojas de pronto alivio y dejar reposar por 10 minutos.
-Infusión de ramas, molerlas.



6. Cimarrón:



incrementa el sabor de las comidas. Se usa para aliviar dolores de estómago, disolver cálculos y mejorar los síntomas de la gripe en niñas(os).



7. Ruda:



se usa para los cólicos (…) y para las limpiezas nasales.


Hablar a plantas from Astrid González Quintero on Vimeo.


8. Eucalipto

Se usa en sahumerio. Se utiliza para la gripe y para la tos tomando la infusión o en vaporizaciones. Las hojas son utilizadas como descongestionante nasal y para combatir infecciones respiratorias. En rituales para sanar las malas energías. La planta quemada purifica el aire.
Vahos: 1 litro de agua y 1 puñado de hojas, calentar hasta ebullición, inhalar varias veces hasta que el vapor se desprenda.